El cántabro Bruno Macho, campeón del mundo joven de boxeo (WBC) realizó el saque de honor del partido Racing-Tenerife.
Bruno Macho se impuso por decisión unánime a Bairon Rodríguez. El duelo cumplió con creces las expectativas y dejó una huella imborrable en los aficionados presentes en el pabellón de Bezana.
Desde el primer asalto, ambos púgiles salieron decididos a darlo todo, conscientes de lo que estaba en juego. Bruno Macho, representante español, y Bairon Rodríguez, su formidable oponente, protagonizaron un enfrentamiento cargado de intensidad y calidad técnica. Round tras round, el pabellón vibró con cada intercambio de golpes, reflejo de la entrega absoluta de los dos contendientes. La igualdad fue la tónica dominante, pero la determinación y el corazón de Macho comenzaron a marcar la diferencia a medida que avanzaba la pelea.
Con el público entregado y el ambiente eléctrico, el combate llegó a su clímax con ambos boxeadores dejándose el alma en el ring. Tras una batalla sin cuartel, los jueces dictaminaron la victoria por decisión unánime (D.U.) a favor de Bruno Macho, desatando la euforia entre los asistentes. El púgil español no solo se alzó con la victoria, sino también con el codiciado título WBC Joven, un cinturón que representa el primer peldaño hacia metas aún más ambiciosas en su carrera profesional.
La conquista de este título no es solo un triunfo personal para Macho, sino un hito para el boxeo español, que ve en él a un talento con proyección internacional. Rodríguez, por su parte, se despidió del ring con la cabeza alta, habiendo ofrecido una actuación digna de reconocimiento y demostrando que tiene madera para regresar con fuerza en el futuro.