El murciano levantó tres bolas de campeonato cuando perdía dos sets a uno y terminó dándole la vuelta a la final en el supertiebreak del quinto parcial y tras más de 5 horas y media. La Chatrier, emocionada y alucinada, fue testigo de un capítulo para la historia del deporte. El español suma su quinto grande, segundo consecutivo en París, tras vencer al italiano por por 4-6, 6-7(4), 6-4, 7-6(3) y 7-6(2).